«Nieve y una alcantarilla»: Andrea Jara Saavedra
A media mañana llegan los almorzadores al bar del Salón Social; la mayoría pertenecen a la cuadrilla que participó ayer en las batidas de jabalí en el coto de la Pardina de Arriba. Olarieta y Josefo, los encargados del establecimiento, depositan en el expositor huevos benedictinos con salmón, palomas de ensaladilla rusa, paletillas de conejo a la brasa y cazuelitas con estofado de corzo y tortilla de miga con longaniza en salmorrejo, en atrayente festival aromático y visual que despeja cualquier atisbo de somnolencia.
En la galería semiabierta que ilumina, mas no calienta, el Sol de invierno, Agnès Hummel y la señorita Valvanera, literalmente pegadas a la tibia estufa de exterior, departen con Luis, el exmosén, recién llegado de México, que les describe el día a día, no siempre apacible, en Putla Villa de Guerrero, donde trabaja desde finales de julio. “Nunca había oído hablar de los triquis”, dice Agnès Hummel.
Llegan, desde el bar, los sones de los Ixo Rai! desgranando Un país. Suspira la señorita Valvanera y el gélido airecillo que recorre, implacable, la galería, se mezcla con la música y la voz de Luis hablando de triquis, nahuas, mixtecos y el Ejército Zapatista.
De momento una pregunta, aunque se que hay muchas pardinas, la de Arriba se podría encontrar en Adahuesca?
No es pronto para sin saber exactamente l motivo, la salivación invada mis papilas gustativas?
El conejo a la brasa espero que será con ajolio.
El nombrecico mejicano si te confundes y no pone la ele «L» alguno se va a enfadar.Te puedo asegurar que yo tampoco había oído hablar de los triquis.
A Ixo Rai! si que los conozco.
La pardina mencionada se halla, sí, cerca de esa localidad, aujque tengo localizadas varias pardinas de Arriba (y de Abajo) en diversos puntos geográficos de la provincia.
Y, efectivamente, el conejo iba acompañado de ajolio; como debe ser.
Pues yo sí había oído hablar de los triquis, pero no de esa longaniza. Fíjate que cosas….
Evidentemente, donde esté una población humana…
No había puesto ningún enlace por el tema de la longaniza porque es un alimento que aparece en muchos escritos de esta bitácora; en Huesca, hablar de longaniza es terminar mentando a la más afamada, además de la que se hace en las casas donde se mata el tocino para consumo familiar.
Nuestra longaniza es practicamente igual que el chorizo fresco y se toma frita o a la brasa, pero como aquí nos dejamos colonizar facilmente, en algunos establecimientos ya se le llama chistorra.
Pues se trata de una colonización mal entendida, porque, como te cuento en otro comentario, la longaniza y la chistorra son completamente diferentes; o, desde luego, lo son en los espacios donde yo me muevo.
Leo y, cuando acabo el texto, suspiro…
Feliz Año Nuevo
Abrazox
Felicísmo año venidero también para ti.
Besos.
Abrazos, perdón 🙂
Me he hecho un lío gastronómico, pues aquí la longaniza es lo que por arriba llamáis chistorra y el salmorejo un gazpacho espeso con más tomate que pimiento y jamón y huevo duro picado por encima.
En mi pueblo (y en Aragón) el salmorrejo/salmorejo (aquí se dice y escribe con las dos erres bien marcadas) es una salsa en su punto perfecto de espesor y bien aliñada con ajo y aceite (y hasta almendras picadas y costillicas de cerdo) que acompaña, preferiblemente, a los huevos y a la longaniza, dándoles un gusto exquisito.
En cuanto a la chistorra y la longaniza, son dos embutidos que, en Aragón, se diferencian perfectamente, tanto en hechura como en ingredientes, tiempo de curación y sabor. La longaniza, de mayor grosor, no suele llevar pimentón, que es, precisamente, el ingrediente estrella de la chistorra.
Querido Una Mirada: He paseado contigo por la encantadora ciudad de Chester, me has hecho emocionar presentándome al poeta Gúdel y como epílogo haces que me relama con esos platos tan sabrosos. Muchas gracias.
Te deseo lo mejor para el año que vamos a estrenar.
Abrazos y besos.
Gracias a ti, Pili, por leer y comentar. Y que sigas -sigamos- con el empeño y la fuerza suficiente para continuar la lucha, también, en el 2014.
Salud e impulso.