«Luz»: Gorka Zarranz Fanlo
Una vez reabierto el nicho, las familiares manos depositaron la urna funeraria de cerámica con las cenizas de él junto al féretro inalterado de la esposa fallecida años atrás; al lado del ánfora las mismas manos colocaron, ante el asombro de los empleados municipales, una baraja española.
“Cuando muera”, les había dicho hace tiempo, “dejadme cerca una baraja. Ya estaremos juntos los cuatro —mi mujer, mi cuñada, mi cuñado y yo— para jugar al guiñote”.
Silvestre, niño que vivió los horrores de la guerra y las penalidades de la posguerra de los vencidos; que creyó en la libertad del Aragón renacido; que fue obrero y sindicalista, exultante abuelo y apasionado bisabuelo, abandonó el Mundo Conocido el 12 de febrero de 2016, pausadamente, con un último esbozo de sonrisa que la Muerte no logró desvanecer.
Silvestre (1926-2016). In memoriam.