«Sinking»: Tony Scheuhammer
Toda mi vida, y ya llevo 26 añitos en este mundo, he estado escuchando en mi casa, en mi pueblo -Ayerbe-, en mi comarca, la misma protesta: ¡pantano no! Pero a pesar de esa sombra oscura que siempre ha rondado por este rincón de la Hoya de Huesca al que nosotros llamamos La Galliguera, mucha gente valiente ha sabido valorar el río como elemento natural y recurso económico, lanzándose a montar empresas y establecerse en esta zona.
Es un hecho bastante inusual en Aragón, donde la imagen típica de los pueblos pequeños es la de las personas mayores charlando al sol. En cambio, en estos pueblos -Biscarrués, Murillo de Gállego, Agüero, Erés, Riglos, Ayerbe, Santa Eulalia de Gállego, Morán, Concilio-, cada día hay más niños pequeños, y las plazas están más llenas de vida y alegría.
Muchos de mis amigos son jóvenes de otras provincias o países, que atraídos por el río han venido a trabajar y enamorados de la zona se han quedado formando su hogar y su familia. La vida de tanta gente que depende del río se ve amenazada. Nos llaman insolidarios si no les damos el agua que necesitan para sus cultivos. Pero yo contesto que somos supervivientes, como ellos, que hay otras alternativas y que habrá que escucharlas.- Lucía Cinto.
“Aragón es uno de los pocos territorios del mundo desarrollado donde estamos dispuestos a inundar tierras, paisajes o lo que sea menester y a gastar enormes cantidades de dinero público e incluso privado con el inaudito fin de cultivar transgénicos. Es increíble”, escribía recientemente José Luis Trasobares en un artículo de acertado título –Obsesión por los embalses-.
Pretender la devastación de una zona, el Reino de los Mallos, para glorificar los maizales monegrinos cuando con la construcción de balsas laterales se obtendrían los mismos resultados, es una propuesta, además de estúpida, desproporcionada y cara, asaz sospechosa si, como se pregona, sólo se desea la ampliación del regadío en las áridas tierras del llano. En cambio, si a la ingente necesidad de agua del maíz -modificado o no genéticamente- se le añaden los importante beneficios dinerarios derivados de la explotación hidroeléctrica, no es preciso hacer ningún malabarismo mental para comprender la principal razón del empecinamiento de los incansables aguadores de la Comunidad de Riegos del Alto Aragón por convertir el Prepirineo en una inmensa bañera de hormigón y vasos comunicantes con desembocadura en espurios propósitos.
Dicebamus hesterna die…
No me fío de ciertos afanes, más cuando, según dices, se conseguiría los mismos buenos resusultados sin destruir lo hermoso de la zona.
Seguro que hay intereses que nada tiene que ver con el bien de la comunidad, sino con los bienes propios.
Espero que dejen a la naturaleza respirar
Abrazos
Lo cierto es, Trini, que si se construyeran las balsas, en lugar del embalse, los regantes tendrían su agua, las gentes de la zona no verían alterado su modus vivendi y el pulso que se lleva manteniendo desde hace un cuarto de siglo terminaría en tablas.
Abrazos.
No alcanzo a comprender para qué y qué balance puede extraerse con este sistema que de constructivo no tiene nada aunque quiera disfrazarse de ello.
Y ¿la parte humana, la flora, la fauna, el paisaje? ¿Todo esto se contempla? ¿Compensa de alguna forma?
Es una pena…
Un abrazo
Desgraciadamente, la “parte humana” sólo se contempla desde el punto de vista de los regantes, apoyados por el gobierno aragonés, la ministra del ramo y el grueso de los partidos políticos, sindicatos agrarios y organizaciones empresariales.
Otro abrazo, Luz.
Hola, mi nombre es Soraya.
Sé que no es el modo más común, el dejarte un comentario en el blog. El tema es que he intentado ver quien eres u obtener algún mail, pero no he logrado visualizar nada en el blog.
Bueno, te cuento soy de Zaragoza, pero ahora vivo en Madrid. Trabajo en el Instituto de Cultura Gitana, y navegando por la red he visto tu blog. Me ha sorprendido muchisimo, que tengas publicaciones y contenidos que traten temáticas gitanas.
Así que me encantaria, poder comunicarme contigo.
Mi mail es: […]
Mi nombre: Soraya Giménez
Un abrazicó….
Hola, Soraya: Al final del sidebar, en la parte derecha de la página, hay un mail de contacto.
Un saludo.
P.S.- Me he permitido la accíón de borrar la dirección de tu mail para evitarte correo indeseado.
Por cierto, ¿ qué pasó finalmente de aquel proyecto de super-las vegas-casino-hoteles que creo querían montar por los Monegros?. porque, claro, para ese proyecto el agua es muy necesaria.
Ya me dirás.
Un saludo
…y en marcha que sigue, Esperanza; hace unos días leí que ya se estaban firmando los papeles de la venta de tierras…
En el proyecto hay hasta… ¡un parque acuático!. El más grande del mundo, publicitaban…
La respuesta a tanta demagogia os la han dado en la calle MILES DE ARAGONESES RECLAMAN LA CONSTRUCCION DEL EMBALSE DE BISCARRUES. Miles de aragoneses a favor frente a unos pocos que lleváis años inventandoos excusas que están hundiendo la agricultura. Si la ministra coge el toro por los cuernos el pantano se hará. TODO ARAGÓN y todos los partidos políticos importantes están a favor del pantano y la manifestación de hoy es una prueba.
Deberías consultar el diccionario para conocer el significado de demagogia y así comprenderías quiénes se sirven de ella para manipular a la opinión pública de manera vergonzosa.
«Miles de aragoneses reclaman…» Pongamos que a la manifestación acudieron 4000 personas, que, evidentemente no son TODO ARAGÓN. Y si tenemos en cuenta la propaganda brutal -cómo se nota que hay dinero- de la macroasociación de regantes que ha llegado a afirmar que del embalse dependen… ¡100.000! familias, ya me explicarás dónde estaban. Las mentiras, ya ves, tienen las patas muy cortas. Pero aun en el caso de que hubiera habido 20000 personas, la cifra no cambiaría la realidad: La construcción de un embalse -otro más- en La Galliguera es un atentado contra el sentido común.
Las gentes de La Galliguera no pretenden hundir la archisubvencionada agricultura de los Monegros; la Comunidad de Riegos del Alto Aragón, en cambio, no duda en exigir la ubicación de un pantano allí donde supondría la ruina de una zona.
Las gentes de la Galliguera han presentado alternativas para que el agua del Gállego pueda llegar a Monegros sin necesidad de embalse; la Comunidad de Riegos del Alto Aragón ni se ha molestado en estudiar otros métodos de acceder al agua. Pantano, pantano y pantano, es su único lema.
En una cosa sí llevas razón: Todos los grupos políticos -salvo uno- son favorables a la construcción del embalse. Obvio. Buscan VOTOS. Y la ciudadanía con derecho a voto abunda más en el llano que en el Prepirineo. No hace falta servirse de una calculadora para que salgan las cuentas.
Y recuerda: Biscarrués es un pueblo, no un pantano.
¿Qué realidades me estás contando tú? La realidad que hay es que cada vez llueve menos y se necesita embalsar el agua en el lugar donde está, si eso perjudica a alguien para eso están las indemnizaciones, igual que pasa cuando se construye una autopista. La agricultura es la despensa de la que hablaba Costa y al lobby ecologista antibiscarrués sólo les interesa defender un tramo de río que hace años que tendría que haber sido regulado. El futuro de Aragón pasa por empezar a utilizar los recursos que se tienen y no quedarse en pamplinas de la era neandertal.
Qué valor tienes en mentar a Costa relacionándolo con el embalse que tanto defiendes y qué manera de tergiversar el tema que nos ocupa mediante generalizaciones que, en este caso concreto, carecen de sentido.
¿A quiénes llamas «lobby ecologista antibiscarrués»…? ¿A las familias de los núcleos afectados por la construcción del embalse? ¿A quienes están potenciando el desarrollo turístico de la zona? ¿A las 80.000 personas que realizaron, en el ejercicio de 2010, actividades de aguas bravas y senderismo en La Galliguera? ¿A quienes acuden masivamente a la Fiesta de la Cereza de Bolea? ¿A los montañeros que coronan los mallos? ¿A los turistas que se maravillan con el castillo de Loarre?
Exactamente, el futuro de Aragón está en sus recursos, en el buen uso de sus recursos, no en apropiárselos, no en exigir el sacrificio de unos para beneficio de otros, no en desdeñar aquello que beneficia a todas las partes enfrentadas.
El agua es un preciado bien que, precisamente porque no sobra, hay que utilizar con sentido común. Y poco de ello hay cuando se sigue sembrando en terrenos salinizados; tampoco tiene mucho sentido fumigar con toxinas que terminan por contaminar los acuíferos dejándolos inservibles.
Poco sentido tiene obcecarse en un embalse cuando unos kilómetros arriba está el pantano de La Peña que, debidamente automatizado, daría cumplido servicio, como lo haría el bombeo desde el pantano de El Grado junto a la construcción de balsas laterales en el mismo Gállego. Pero, claro, si no hay pantano no hay salto hidroeléctrico y sin este último no hay buenos dividendos, con lo que volvemos al principio de la historia y al verdadero quid del empecinamiento aguador.