«Les Chats de la Rue du Buffet»: Gilles Durand
I
El autobús se aleja de Doué-la-Fontaine entre perfumes de rosas que se infiltran, persistentes, en el interior del vehículo hasta conquistar el oxígeno e inundar los pulmones de la decena de viajeros que regresan al cuartel general de Montreuil-Bellay. En el exterior, un abanico de nubes desplegado sobre la campiña saludada por el río Thouet, cuyas aguas laminan la muralla medieval de la villa; a lo lejos, los últimos rayos solares del día iluminando el castillo [FOTO] y, quizás, los tejados gatunos de la rue du Buffet.
—Mañana visitaremos el castillo de Ussé y los bosques anexos —anuncia Gilles durante la temprana cena—. Es allí donde Perrault imaginó a la Bella Durmiente. Y pasaremos por el de Montsoreau, a orillas del Loira.
II
Se va recogiendo la tarde entre destellos naranjas y salen los gatos de la rue du Buffet a esperar la noche impuntual detenida sobre la hierba del antiguo campo gitano de Montreuil-Bellay. Cuatro figuras quietas contemplan, con los rostros serios, el monumento [FOTO] que recuerda a los seis mil quinientos gitanos franceses encerrados —en el primer lustro de los años cuarenta— por sus propios compatriotas en ese espacio, otrora rodeado de alambradas, que mantuvo su condición de cárcel étnica hasta un año después de haber terminado la guerra, como si la victoria aliada sobre el nazismo se hubiera detenido ante los portones cerrados donde se apiñaban hombres, mujeres y criaturas gritando su hambre y su dolor a los lugareños.
Fenece el día y se ilumina la villa. Van y vienen los gatos de la rue du Buffet y deshacen la ruta recorrida los compungidos visitantes del antiguo campo de concentración gitano, allí donde Taloche —el real [1] y el recreado por Tony Gatlif en la película Korkoro— y los hombres y mujeres anónimos que miraron a los gitanos y únicamente vieron a otros seres humanos, soñaron un universo distinto.
«Si quelqu’un s’inquiète de notre absence, dites-lui qu’on a été jetés du ciel et de la lumière, nous les seigneurs de ce vaste univers. [2]».- De la canción Les bohémiens, de la película Korkoro (Liberté).
Primavera. 2019
NOTAS
- [1] Taloche fue un músico romaní de origen belga internado en el campo gitano de Montreuil-Bellay. Ayudado por un notario, consiguió comprar una casa y fue liberado a condición de abandonar su vida nómada. Dado que no lograba adaptarse al sedentarismo, decidió marchar a su país de nacimiento. Detenido por los alemanes en el norte de Francia, su rastro y el de las personas que viajaban con él, se perdió en Polonia, en un tren de prisioneros que se dirigía a Auschwitz.
- [2] «Si alguien se preocupa por nuestra ausencia, decidle que hemos sido expulsados del cielo y de la luz, nosotros, los dueños del vasto universo.»
Hasta que empecé a leerte menciones sobre este tema, desconocía que los nazis también hubieran perseguido a los gitanos hasta ese extremo. Sabía que, para ellos, lo único aceptable era la «pura raza aria», pero no sabía que hubieran llegado a encarcelarlos.
…a encarcelarlos, experimentar con sus cuerpos y gasearlos. Con los gitanos empezaron aun antes que con los judíos, y eso que, en un principio, los genetistas nazis los consideraban arios, hasta que observaron su rebeldía, desapego a las consignas del partido y «malas costumbres«. Pero, como dijo un gitano francés, «si los nazis solamente nos hubieran exterminado a nosotros, serían considerados benefactores de la humanidad«… De hecho, hasta 1989, Alemania no reconoció oficialmente el exterminio nazi de entre medio y un millón de personas de etnia gitana (es imposible precisar la cifra porque, por su sedentarismo, la mayoría de los gitanos no estaban registrados en ningún padrón). Sólo cuando algunos supervivientes y sus descendientes empezaron a recoger datos, algunos nombres y ubicación de los campos de exterminio , empezó a salir tímidamente a la luz la Porrajmos, que es el nombre romaní del holocausto de los romá europeos, que los gitanos de todo el mundo recuerdan el 8 de abril
Tampoco se conoce mucho la persecución que hubo contra cristianos, tanto católicos como protestantes y la cantidad de sacerdotes, pastores y monjas que murieron, pues la intención de Hitler y sus secuaces era crear una religión propia con base en el nazismo.
En el tema de la religión no estoy del todo de acuerdo contigo. Salvo los Testigos de Jehová, que fueron perseguidos por sus ideas antimilitaristas, las personas católicas y protestantes lo fueron, no por sus ideas religiosas, sino por su oposición al nazismo, lo mismo que a miles de alemanes que aborrecían las ideas nazis; incluso dentro de la jerarquía hitleriana había católicos y protestantes que profesaban su fe sin mayores problemas. En cambio, a judíos, gitanos y eslavos se los exterminaba por su genética, como a las personas, arias o no, con malformaciones o anomalías físicas y psíquicas y a personas, arias o no, homosexuales. Las leyes de exterminio nazi eran muy, muy concretas y diseñadas para colectivos concretos.
Quizás la diferencia sean los verbos perseguir y exterminar, que parecen similares pero que no lo son en absoluto.
Triste lo que pasó.
Triste y terrible, sí.
Yo lo de los gitanos, alguna idea tenía. De haber leído algo y se queda la idea, pero no podría señalar ningún hecho concreto. Aportando siempre. Gracias. Buen finde.
El puebo gitano, desperdigado y sin ningún Estado propio al que acogerse y con escasas simpatías entre la población europea, fue el gran olvidado entre las víctimas de la barbarie.
Gracias a ti.
Salud.
Por supuesto que no es lo mismo perseguir que exterminar, pero hay estudios muy serios sobre esa intención nazi de una «religión alemana», de lo que habla incluso la Wikipedia.
Las ansias dominadoras de semejante batiburrillo bárbaro pretendían copar todos los ámbitos y la tibieza europea -Estado Vaticano incluido- ante las primeras andanadas tuvo las consecuencias que luego se vieron.
Me quedo con la música, los castillos y el muy necesario recuerdo a los gitanos encerrados y exterminados, porque el monumento no me gusta nada, algo que me pasa a menudo con el «arte» contemporáneo.
El monumento es feo, feísimo, pero sigue siendo un lugar de memoria. Y fíjate que tanto los barracones como la cárcel subterránea del campo gitano de Montreuil-Bellay fueron construidos por refugiados españoles, a los que se obligó a trabajar allí.
Qué historia tan dejada de lado por la historia «oficial». Es como la historia más triste al margen de la Triste Historia.
Me salvas con los enlaces, puedo llegar a comprender mejor lo que otros textos a veces dan por sentado, pero para el que lee desde la lejanía, desde donde a veces algunos términos y nombres propios suenan más lejanos aún, son necesarias algunas aclaraciones.
Gracias.
Hay historias que siempre se quedan a la mitad, como flotando en el tiempo; es el caso de lo ocurrido a los gitanos europeos con los nazis.
Procuro, siempre que se puede, sustentar los datos con enlaces, pero si hay aspectos que no entiendes no dudes en decírmelo y así no te quedas con dudas.
Un abrazo.
No hay que olvidar a todos esos gitanos perseguidos con el único fin de la exterminación.
Me alegra que nos airees la memoria, Una mirada, y alces la voz en nombre de todos ellos (y muchos otros perseguidos). Demasiado dolor e incomprensión, que no se mitiga por muchos años que pase de todo aquello.
Un abrazo.
Nada compensa el sufrimiento, por eso, la única forma de justicia que queda es el recuerdo, el reconocimiento de las víctimas ninguneadas, que su padecimiento sea capaz de de humanizarnos más y la memoria ejerza de parapeto contra todas las formas de discriminación.
Otro abrazo.
Cuando no conozco nada o casi nada del tema busco más información por ello he encontrado un artículo en wikipedia que empieza así «Genocidio gitano o porraimos (en romaní, Porrajmos, literalmente «devoración») son los nombres dados a los intentos de la Alemania nazi y Austria nazi de exterminar a la mayoría de los pueblos gitanos de Europa, como parte del Holocausto durante la Segunda Guerra Mundial.»
https://es.wikipedia.org/wiki/Porraimos
Afortunadamente, un sinfín de organizaciones gitanas llevan años luchando para evitar que el holocausto de los gitanos europeos no quede en el olvido, conscientes del nulo interés de la sociedad europea en general y de los brotes antigitanos que se dan en muchos estados, sobre todo, en los que antaño formaron parte del bloque comunista.
Yo recuerdo haber leído algo de la persecución de los gitanos por la Alemania nazi, lo que parece es que pese a los años, hay historias que no se terminaron de escribir y sospecho que esta de los gitanos es una de ellas, como dejada en un segundo plano. Tan interesante es el post, como tus comentarios explicativos. Un abrazo.
Lo cierto es que lo sucedido con los gitanos europeos en la época nazi está perfectamente documentado; desde 1970 los esfuerzos para la dignificación de las víctimas gitanas de los Tiempos Oscuros han sido constantes pero con escasa incidencia en los medios. Los gitanos en general, vivos o muertos, interesan poco fuera de los «tópicos-típicos», de ahí que existan los llamados gitanos invisibles, esos que no pueden estandarizarse en todos esos prejuicios porque ni son marginales ni trapichean ni flamenquean ni salen en la tele envueltos en brillos haciendo el canelo.
Otro abrazo.