«Bouquet y mariposas»: Archivo personal
Para Akane.
«(…) La nube donde vive yaya se convierte en estrella por la noche, ¿a que sí?… Claro… y brilla tanto, tanto, tanto para que yo la vea, ¿a que sí?… ¡Mira, mira! ¡Esa nube grande es la de yaya!… ¿También estarán en la nube de yaya el gato Nico y la periquita…? ¿Y el perro Homer…? Y yaya les habrá puesto una barandilla para que no se caigan si se asoman, ¿a que sí? Y… y… a lo mejor hay un ascensor invisible en la nube y baja yaya a oler las flores… Y verá las mariposas… ¡Yaya! ¡Yaya! ¡Estoy aquí, debajo de tu nube! ¿Me ves, yayita…? ¡Las mariposas son de mentiritas y las he pinchado despacito para que no les hagan daño a los claveles! (…)»
Cascabelean, bajo la levedad danzarina de los diminutos pies inquietos, las piedrecitas humildes que alfombran la salida posterior del cementerio. Y el ciprés más cercano, el que preside el banco de piedra que acompaña la tumba del montañero, mece la cúspide de su copa bajo un cirro de bordes acaracolados.
Sin palabras me quedo
¡Qué hermosura! Y, cuánto sentimiento.
En la nube o en la estrella, la yaya sigue influyendo en esa niña aquí en la tierra.
Abrazos
Las criaturas crean momentos inolvidables que inundan el corazón de las personas adultas de una pizca de inocencia.
La niña es real; su monólogo, también. El instante, tan mágico, que si la nube con la yaya, el perro, el gato y la periquita hubiera descendido hasta posarse en el suelo, ninguna de las personas que se encontraban allí en esos momentos se hubiera sorprendido.
Besos.
Ingenuidad total, me ha traído a la memoria la cantidad de montañeros que dejan su vida en las montañas de Aragón todos los años.
Muchos montañeros; demasiados. La tumba del montañero que se nombra en el post es un promontorio marrón agrisado, con sus pliegues, su cumbre, su cuerda de escalada pasada por los mosquetones…
Si alguien ama a una flor de la que no existe más que un ejemplar entre los millones y millones de estrellas, es bastante para que sea feliz cuando mira a las estrellas. Se dice: «Mi flor está allí, en alguna parte»….
El principito. A. Saint-Exupéry
Hay un universo poblado de millones de Flores Únicas abonadas y regadas por los recuerdos. Y así se mantienen, lozanas, perennemente.
Lírico, muy lírico y lleno de imágenes de gran hermosura.
Salud!
…es que las criaturas, cuando verbalizan sus sueños, son insuperables.
Salud.
De qué forma tan sencilla desdramatizan los niños la muerte. El monólogo de la niña despierta toda la ternura del mundo.
Qué nombre tan original y bonito, Akane. No lo conocía.
Feliz domingo.
La imaginación infantil carece, afortunadamente, de autocensura. Lo irreal y lo real van de la mano.
El nombre Akane tiene distintos significados. Personalmente, me decanto por la traducción del mapuche: Nube.
Buen domingo y propicia semana.
Una niña encantadora. con una actitud distinta a la muerte que tienen los adultos. Tal vez tenga razón, y haya que ser positivos hasta en momentos como esos.
Saludos cordiales.
Pues sí. Y entrar en ese mundo de fantasías infantiles enriquece a las personas adultas.
Encantado de recibir, de nuevo, tu visita.