«Fuente del Ibón, en el parque Miguel Servet de Huesca»: Archivo personal
Preámbulo
Hace setenta y cinco años nació la Jota de San Lorenzo, la más emblemática del folclore oscense. Surgió en un emplazamiento asaz curioso: A bordo del buque Monte Ayala, que surcaba el Atlántico hacia Sudamérica con un grupo de jóvenes músicos y bailadores de los Coros y Danzas de Educación y Descanso entre los que se encontraban varias joteras y joteros de Huesca con su rondalla.
Durante la larga travesía, entre ensayo y ensayo, los representantes oscenses pensaron que sería buena idea ampliar su repertorio de baile y, así, la joven jotera Sarita Villacampa, que vivía por y para la jota, ideó la coreografía de la que bautizaron como Jota de San Lorenzo, en honor al patrón de Huesca, que tiene una parte cantada que, a día de hoy, no hay oscense que no haya entonado alguna vez: “San Lorenzo, mi patrón. / Viva Huesca que es mi pueblo. / San Lorenzo, mi patrón. / Las mozas que van por agua / a la fuente del Ibón. / A la fuente del Ibón. / Viva Huesca que es mi pueblo”.
Tomando como punto de partida aquel viaje folclórico, el músico Marko Zaragoza —hijo de uno de los pasajeros del Monte Ayala que tocaba en la rondalla oscense— publicó en 2019 una digna y entretenida novela, La silueta del Monte Ayala, en la que los sucesos reales y la ficción se amalgaman para componer una trepidante historia de conspiraciones y espionaje.
UNO: Vida y muerte de la histórica fuente del Ibón
Volvamos un instante a la letra de la Jota de San Lorenzo, donde dice… Las mozas que van por agua a la fuente del Ibón. Porque es ella, la fuente a la que alude la jota, la protagonista de este artículo. La fuente del Ibón ya aparece documentada como «antiguo manadero para el abastecimiento de agua» en el siglo XV; sus aguas procedían de un manantial próximo a la ciudad que, por una conducción de piedras, fluía hasta decantarse en la bóveda de la que salía al exterior. Aunque el paso del tiempo fue erosionando su estructura, las reparaciones que se llevaron a cabo en los siglos XVI a XIX en el encajonamiento de la conducción hídrica y la bóveda, pero respetando su apariencia, le devolvieron el viejo esplendor.
El fontanar estaba decorado en su frontal con un escudo en alabastro en el que aparecían cincelados dos ángeles que sostenían una cartela donde figuraban un lienzo de muralla, con su portalón y dos torreones, y una muesca —que eso significa Osca/Huesca, «muesca»— que caía sobre los caños de agua.
Parece ser que, a principios del siglo XIX, el Ayuntamiento oscense consideró que las abundantes huertas que copaban las tierras entre el manantial de origen y la fuente, podían ser un foco que contaminara el agua de boca, así que mandó construir, en distintos puntos de la ciudad, ocho nuevas fuentes de abastecimiento para sustituir a la emblemática del Ibón que, pese a todo, siguió siendo —a la par que la fuente del Ángel, otro surtidor histórico— la fontana de referencia y punto de encuentro de mozos y mozas, congregados con sus trajes de domingo en las inmediaciones para flirteos y requiebros, como así se había hecho «de toda la vida».
Pero, señoras y señores, en los años cincuenta del siglo XX llegó a Huesca el progreso en forma de Plan de Desarrollo Urbanístico ¿trazado sobre plano desde Madrid…? Y como los señores ingenieros de la capital de España no habían pisado Huesca en su vida —no se me ocurre otra explicación— tuvieron la portentosa ocurrencia de dibujar una calle allí donde, desde hacía quinientos años, se ubicaba la fuente del Ibón. El servil alcalde oscense dijo amén y la fuente icónica, la más entrañable para los oscenses, fue destruida. Solo se salvó el escudo de su frontal, que alguna mente algo más lúcida de la Casa Consistorial decidió que no merecía caer bajo los picos y martillos destructores y mandó que lo guardaran en el Ayuntamiento donde, al parecer, continúa, aunque bastante deteriorado.
DOS: La fuente del Ibón de las nuevas generaciones
En la década de 1960 el Ayuntamiento de Huesca acometió la ampliación del parque Miguel Servet. Entre los nuevos espacios que se crearon hubo uno que pronto llamó la atención de la ciudadanía: Una fuente llamada… del Ibón. No se trataba de una reconstrucción de la fuente histórica que había estado emplazada a menos de doscientos metros de la recién construida sino una especie de ¿homenaje?, ¿desagravio? a la fontana medieval cuyo derribo había causado tanto pesar en quienes la consideraban un símbolo oscense. La novedosa fuente del Ibón solo se asemejaba a la desaparecida en el nombre. En nada más.
Tuvo la gallardía el Ayuntamiento de no usar el frontal de la anterior para evitar más controversias de las que hubo, pero se dejó caer que, algún día, volvería a erigirse la icónica fuente con su primitiva arquitectura y su escudo en alabastro. “¿En qué lugar?”, preguntaba la gente. “Cerca de donde estuvo siempre”, respondían. Cerca, claro, porque en el sitio original se yergue un edificio de oficinas y viviendas que no se va a demoler para dar gusto a los oscenses nostálgicos.
Para las nuevas generaciones, que habían oído hablar de la antigua fuente del Ibón pero solo conocían la del parque Miguel Servet, el discreto rincón de la fuente sustituta fue un remanso. La de charlas, besos, risas, lecturas, lametones y juegos que habrán tenido lugar allí, en ese banco de piedra que tantos secretos guarda y en esa mesa encementada que, si tuviera un atisbo de vida para escribir sus Memorias, haría sonrojar a más de uno o una.
La fuente del Ibón del parque Miguel Servet brilla, desde hace años, con luz propia; ya no es un remedo de la antigua ni se pronuncia su nombre con cierto retintín. Este verano, dentro de las actividades organizadas por el Ayuntamiento en el programa Huesca es otra historia, la que se ha llevado a cabo en el entorno de la fuente del Ibón ha sido la que más público ha concitado.
Bajo la dirección del escritor oscense Óscar Sipán, acompañado al violín por Daniela Nikolova, se ha desarrollado en este espacio del parque la actividad titulada Crímenes en la fuente del Ibón, en la que, durante ocho sesiones que han reunido a un total de 2.080 personas, Óscar ha hecho viajar a los presentes por algunos de los crímenes ocurridos en la ciudad desde finales del siglo XIX, además de visitar algunos de los lugares donde se cometieron.
Al éxito de la iniciativa y a su excelente desarrollo hay que sumar la interactuación entre narrador y asistentes, la presencia entre el público de descendientes y allegados de víctimas y victimarios, incluso la de un forense que aportó su experiencia personal sobre uno de los crímenes que se estaban relatando, y, cómo no, el inigualable marco del entorno de la fuente del Ibón, idóneo para sumergirse, en las noches veraniegas, en estas muertes a mano airada.



Es muy interesante te mando un beso.
Me he extendido demasiado… Otro beso.
Total, que esta fuente tiene ya su propia historia y, con un par de generaciones más, terminará por superar a la antigua.
La fuente del parque tiene ya sus buenos cincuenta y tantos años, lo que implica que es el único referente de una gran parte de la población oscense que nació después de ser demolida la otra. Y, fíjate, que algunas personas de Huesca que han leído esta entrada me han dicho, a través del whatsapp, que desconocían que esta fuente del Ibón no fuera la reconstrucción de la anterior ni que no estuviera situada donde creían que había estado la histórica.
Por cierto, lo primero que he pensado al ver la foto y antes de leer la entrada, es que a quien se le habrá ocurrido poner esas barandas blancas en un sitio tan romántico. La piedra, las hojas muertas, el parque de fondo… y la madre que trajo al mundo a quien puso las barandas.
Jajaja… Esas barandas blancas están en todo el parque; son las que delimitan los espacios. Las que se entrevén en la foto se hallan en la rampa de acceso de la parte baja, puesto que la fuente está un nivel por debajo del paseo y se llega a ella por unas escaleras.
Escuchada la jota y apuntado el libro, quedaba la bella fuente del Ibon y el malnacido Plan Urbanístico, de mentes tan poco pensantes, claro que, eran los años que eran. Y luego la nueva Fuente de nulo parecido a la anterior. Al menos las nuevas generaciones la han tomado como suya y así brilla en el parque Miguel Servet. La iniciativa «Crímenes en la fuente del Ibón» me parece magnífica y por lo visto un éxito, así como la interacción con el público, porque eso da una vidilla extra a los relatos de crímenes. Super interesante. Un abrazo y Salud.
Como cada vez queda menos gente que conociera la fuente histórica y otras muchas personas desconocen que la del parque no es la primitiva, la actual es la fuente del Ibón de referencia desde su construcción hace cincuenta y tantos años, y esta actividad de los crímenes aún le ha dado más vidilla. Quizás, si no hubiera habido esos Crímenes en la fuente del Ibón, ni se me hubiera pasado por la cabeza escribir sobre ambas fuentes y la jota que nombra a la que ya no existe.
Más abrazos. Salud.
Es una pena, la verdad. Da lástima saber que la concatenación de malas decisiones (praxis) haya borrado de un plumazo la historia viviente en forma de fuente original, con el significado y sentido que la vio nacer.
Espero que esta iniciativa sirva para subsanar, en parte, lo que hicieron a la fuente y a la historia del lugar.
Un beso grande, me despido al son de una jota. Huesca -muesca.
Nélida
Desgraciadamente, en todos las zonas de España se han sacrificado elementos históricos que podrían haber convivido con la modernidad sin ninguna complicación, pero se ve que, para quienes ostentan cierto poder y mucho parné, les resulta más práctico derruir que rehabilitar.
Hace poco, han empezado a construir en Huesca una urbanización que se ha llevado por delante un edificio modernista que, sí, estaba deteriorado, pero se hubiera podido rehabilitar; con ese edificio, han caído también varios árboles plataneros, fuertes y sanos, que han suscitado malestar, protestas y manifestaciones ciudadanas, y todo en favor de una rotonda. En fin…
Besazos.
La fotografia de la fuente es preciosa y la canción y el baile muy alegres.
🥰❤️
Estupendo que te gusten.
Salud.
Esa actividad en la «nueva» fuente del Ibón debería conocerla el paisano Jesús Lens, director de Granada Noir, el festival dedicado al género negro, que se celebra aquí todos los años
Seguro que en ese interesante festival vuestro colabora la granaína Men Marías, cuyas novelas negras se desarrollan en Granada. Con ella y contigo he aprendido a conocer calles y lugares de la ciudad de la Alhambra. Los «Crímenes en la fuente del Ibón» más que género negro son lo que se denomina true crime (crímenes reales).
Pues ya ves. Aquí Men Marías es poco conocida, hasta el punto de que yo supe de ella por tí. «Suena» mucho más May R. Ayamonte, aunque no nació en Granada.
Andá, que me he confundido. Es esa, May R. Ayamonte, la que escribe novelas donde la ciudad forma parte importante de la trama. La he confundido con Men Marías porque estaba envolviendo un libro suyo para regalar. Si no me la nombras tú no habría reparado en el error.
En el periódico IDEAL viene hoy una entrevista con ella
Pensaba que el acceso era de pago y no, he podido entrar y leer la entrevista. Me ha gustado su llaneza al decir que ha ejercido de negra para algún escritor famoso «porque había que comer» y esa confesión de que algunos escritores le caen mal. Y ese apego a Granada que la hace merecedora de convertirse en Hija Adoptiva de la ciudad.
Yo estoy suscrita porque con la suscripción de papel me dan la digital y la de «Kiosko y más», de donde puedo bajarme artículos en PDF para conservarlos, pero lo tengo todo abierto en el móvil y el ordenador para no tener que estar metiendo contraseñas, así que nunca sé si los artículos que enlazo están en abierto o no, ni sé tampoco el criterio que siguen para reservar algunos a los suscriptores.
En cuanto a esta escritora, que es de Ayamonte y lo lleva en su nombre de guerra, por supuesto que se merece ser hija adoptiva, pero si nombraran a todos los que no habiendo nacido aquí, se apegan a esta ciudad, seríamos millones en vez de los poquitos que somos. Granada tiene muchos defectos y los granadinos más aún, pero no sé qué pasa que el que viene se queda enganchado como de una droga.
Afortunadamente, la entrevista estaba en abierto.
El apego a Granada, aunque no se haya nacido allí, dice mucho, y en positivo, de la propia ciudad y de quienes en ella habitan.
Toc toc Holaaaaa. Paso para desearte un muuuuy felizzzz cumpleaños, querido amigo!!! 🎂 🥳
Me alegra que para esta fecha tan señalada, ya estés por aquí de nuevo en el blog.
Espero que pases un día estupendo y ¡cómo no! que se cumpla tu particular deseo. Felicidades, hoy y siempre. Besossss 🫂😘😘
(Nélida)
jaja estoy fatal , ¿Puedes creer que pensé que hoy era día 16? Que es la fecha real de tu cumpleaños.
Pues ya ves, ni por un día ni por dos, me adelanté cuatro días! Sorry 🙏😃
(Nélida)
Pues a mí me ha hecho ilusión que te acordaras, así que me doy por bien felicitado. Además, que yo me retrasé en el tuyo.
Un abrazo, apreciada Nélida.
Gracias mil por esa felicitación tan cariñosa que me da bríos para seguir sin que me pesen los años.
Un beso sonoro acompañado de un abrazo tierno.
Buena historia tiene y seguirá teniéndola. Por cierto, se ve preciosa en otoño.
Según leo has cumplido años. Fe🎉 Li 🎂 Ci 🥂 Da 🍾 Des 😘y a seguir cumpliendo muchos más.
Por si me torea como siempre. Soy Laura.
Buena semana.
Un abrazo
El rincón de la fuente parece querer engalanarse para el otoño; esta estación le sienta muy bien.
Muchas gracias por la felicitación, Laura. Un año más, pero… ¡que sigan llegando muchos!
Otro abrazo.
Vaya, años siguiendo tus escritos y recién ahora vengo a enerarme de lo que signfica Huesca. Tiene sentido.
Deben ser bien interesantes esos encuentros de los Crímenes… por aquí, en esta metrópoli al Sur del mundo, son muy numerosas las iniciativas de ese estilo. Muchos turistas de interior del país aprovechan su viaje a la Ciudad para realizar las experiencias por el estilo.
Abrazos!
PD: todo lo que tenga que ver con San Lorenzo cuenta con mi beneplácito.
FRodo
Esas iniciativas culturales que juntan al aire libre a un buen número de personas desconocidas son siempre interesantes y se extraen buenos aprendizajes.
Sí, ya sé que eres un sanlorencero de pro. Que le vaya bien al equipo.
Salud.